viernes, 15 de febrero de 2013

El día del asteroide

El día del asteroide

Día 15/02/2013 - 13.44h

La roca 2012 DA14, descubierta desde España, volará el viernes a 27.000 km de la Tierra, una aproximación de récord que la situará incluso por debajo de los satélites

El día del asteroide
J. Torres


La noche del 22 de noviembre de 2012, un telescopio robótico del Observatorio de La Sagra en Granada rastreaba el cielo en busca de asteroides cercanos a la Tierra cuando, de repente, un punto luminoso apareció en el Este. En ese momento, Jaime Nomen, director del centro astronómico, viajaba en un velero a dos millas de la costa catalana, pero, conectado permanentemente de forma remota, recibió de inmediato el aviso en su ordenador. Se trataba de un asteroide de unos 45 o 50 metros de diámetro. En cuestión de horas, el Minor Planet Center en Boston (EE.UU.), la institución encargada de recopilar este tipo de observaciones llegadas de todo el mundo, ya tenía los datos del objeto y dos días después el Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL) de la NASA calculaba su órbita. Con medios mucho más modestos que los estadounidenses, el equipo español había descubierto un premio gordo, el asteroide más mediático -con permiso de Apofis-, de los últimos tiempos. Se llama 2012 DA14, una especie de matrícula provisional que se refiere al año, el mes y el orden del descubrimiento, y nos visitará este viernes 15 de febrero a una distancia de 27.000 km, por debajo de la órbita que ocupan los satélites geoestacionarios. Entonces se convertirá en la roca de cierto tamaño detectada que haya volado más cerca de la Tierra.
«La historia de cómo se produjo el descubrimiento del asteroide parece de película, pero en realidad refleja el trabajo que hacemos en La Sagra, siempre pegados al ordenador porque una roca como esta puede aparecer en cualquier momento y la reacción debe ser inmediata; si no, la perdemos», explica Nomen. El asteroide se encontraba entonces a más de 4 millones de km de la Tierra, nada que ver con la «caricia» que esperamos en cinco días y que los científicos descartaron hace tiempo se transforme en bofetada. No existe ninguna posibilidad de impacto en esta ocasión. Es un alivio, porque si se estrellara, liberaría una energía de 2,5 megatones en la atmósfera. No causaría un armagedón, pero sí una devastación a escala regional y si se precipitara en el mar, tsunamis incluso más peligrosos. En 1908, en Tunguska, Siberia, el impacto de un asteroide rocoso o un cometa algo menor (de 30 a 40 metros de diámetro) arrasó 1.200 km cuadrados de tundra y el fulgor de la explosión se apreció desde el norte de Europa e incluso en algunas zonas de Estados Unidos. En Arizona, un objeto metálico similar formó el famoso cráter Barringer, de 1,5 km de diámetro, cuando se estrelló hace unos 50.000 años. «Es el objeto conocido con potencial para hacer daño que más se acerca a la Tierra, eso es lo que lo hace tan interesante», dice Nomen.
Aquí abajo nos libramos, pero ¿es probable que cause algún desastre allá arriba? Tanto la NASA como la Agencia Espacial Europea (ESA) han afirmado que, aunque la trayectoria de la roca se adentra en la órbita en la que se encuentran los satélites de comunicaciones, el peligro para estos artefactos es mínimo, ya que el asteroide llega «desde abajo» y no cruza en el mismo plano el cinturón geoestacionario. Tampoco lo hay para la Estación Espacial Internacional, que orbita mucho más abajo, a menos de 400 km sobre nuestro planeta.

«Don Quijote» contra el gigante

En realidad, poco sabemos del visitante espacial. Por su brillo, los científicos estiman que tiene un diámetro de unos 50 metros y una masa de 130.000 toneladas de composición desconocida. Viaja a una velocidad de 7,8 km por segundo y es de tipo Apollo, lo que quiere decir que tiene la inquietante costumbre de cruzar periódicamente nuestra órbita. Curiosamente, solo tarda un día más que la Tierra en dar la vuelta al Sol (366,2 días). Los astrónomos lo seguirán con muchísima atención para desvelar con exactitud su verdadera naturaleza (su masa, tamaño y período de rotación), especialmente por si puede suponer un peligro en un futuro lejano, ya que la gravedad de la Tierra modificará su trayectoria.
Un asteroide del tamaño del 2012 DA14 se nos aproxima así de cerca cada 40 años y uno de ellos impacta contra el planeta una vez cada 1.200, según el Programa de Objetos Cercanos a la Tierra de la NASA. ¿Qué hacer en caso de que se nos venga uno encima? Una empresa española, Elecnor-Deimos, propone una misión, llamada «Don Quijote», que consiste en enviar una sonda exploradora, «Sancho», para estudiar la roca, y después impactar a gran velocidad otra de entre 500 y 1.000 kilos, «Hidalgo», para que pueda desviarla. La ESA lo considera el método más eficaz, al dar una respuesta inmediata y segura, y funcionaría con pedruscos de hasta un kilómetro de diámetro. «Con desviarlo cien micras por segundo ya sería suficiente. Para rocas mayores, como la que acabó con los dinosaurios, no habría más remedio que recurrir a una explosión nuclear, pero puede haber metralla y el riesgo de un fallo todavía es muy grande», explica Miguel Belló, director gerente de la compañía.

Con unos prismáticos

La máxima aproximación de 2012 DA14 se producirá a las 20.24 hora peninsular española sobre el océano Indico, en las costas de Sumatra. «En España, se podrá ver como un punto de luz relativamente veloz a partir de las diez de la noche, aunque ya estará alejándose de la Tierra. Sobre las once se situará cerca de la Estrella Polar», apunta el responsable de La Sagra. Solo hacen falta unos prismáticos. Como ocurre con todas las observaciones astronómicas, es necesario buscar un lugar oscuro alejado de las luces de las ciudades y que el tiempo acompañe.
Los científicos estiman que existen aproximadamente 500.000 asteroides cercanos a la Tierra del tamaño de 2012 DA14. De ellos, apenas se han descubierto el 1%. Un buen motivo para seguir escrutando el cielo.

6.500 asteroides en cinco años

Esta en ruso pero registra el sonido del momento del impacto

www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=XIAm5hq8WWc#
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Esta en ruso pero registra el sonido del momento del impacto

Los expertos no descartan que el bólido de Rusia tenga relación con el 2012 DA14

Los expertos no descartan que el bólido de Rusia tenga relación con el 2012 DA14

El meteorito de Siberia puede ser un fragmento pequeño del asteroide 2012 DA


Mientras todo el mundo está pendiente del asteroide 2012 DA14, de unos 50 metros de diámetro, que pasará cerca de la Tierra esta noche, otras piedras del cielo se han adelantado cayendo sobre Siberia. No se trata del mismo objeto, pero los expertos no saben aún si pueden estar relacionados, porque el meteorito de Siberia puede que sea un fragmento que se desprendió del asteroide.
El 2012 DA14 está siendo seguido con precisión y tanto la NASA como los astrónomos especialistas han descartado que pueda chocar con la Tierra, mientras el de Siberia no se esperaba. “Puede ser una coincidencia, pero la probabilidad de que uno tenga que ver con otro es alta, puede que sea un trozo que vaya en la misma órbita”, señala el ingeniero Miguel Belló Mora, expertos en dinámica orbital.
“Es un bólido muy lento, por lo que he visto en los vídeos del suceso, y también el 2012 DA14 es lento, por lo que yo sospecho que podrían estar relacionados teniendo en cuenta la geometría y la velocidad”, señala el astrónomo Josep María Trigo, científico titular del CSIC en el Instituto de Ciencias del Espacio de Barcelona. “Desde luego es mucho más pequeño que el asteroide que pasará esta noche”. Podrían estar relacionados, sugiere, porque se han podido desprender piedras del 2012 DA14 por su misma rotación y por el efecto gravitatorio al acercarse a la Tierra y ha pasado otras veces. “Dentro de unas semanas podremos definir la trayectoria de este bólido analizando los vídeos; es difícil, porque es diurno y tenemos el fondo de estrellas para hacer los cálculos, pero no imposible”.
Belló Mora añade que, si el asteroide se ha fragmentado, pueden ir varios trozos siguiendo la misma órbita que el 2012 DA14, aunque en este caso, es raro que vayan tan separados, porque suelen ir muy juntos. Todo son hipótesis, recalca, no se podrá saber hasta que se hayan calculado bien los parámetros del intruso sorpresa de la noche pasada.
Fuentes de Pais

La noche de DA14

Los fragmentos de lo que podría ser una lluvia de meteoritos se han precipitado esta madrugada sobre las regiones rusas de Cheliabinsk, Kurgán, Tiumén, Svédrlovsk y también sobre el norte de Kazajstán. Prácticamente todos se desintegraron al entrar en la atmósfera terrestre a excepción de uno, el más grande, que cayó sobre la región de Cheliabinsk en varios fragmentos. Así lo asegura la portavoz del Ministerio de Protección Civil, Elena Smirnij.

Estela del Meteorito, Fuentes ABC

Internacional

Al menos 700 heridos por la caída de un meteorito que siembra el pánico en Rusia Pulse para ver el video

Al menos 700 heridos por la caída de un meteorito que siembra el pánico en Rusia

Fragmentos de la piedra incandescente cayeron está mañana sobre varias localidades en la región de Cheliabinsk

Los fragmentos de lo que podría ser una lluvia de meteoritos se han precipitado esta madrugada sobre las regiones rusas de Cheliabinsk, Kurgán, Tiumén, Svédrlovsk y también sobre el norte de Kazajstán. Prácticamente todos se desintegraron al entrar en la atmósfera terrestre a excepción de uno, el más grande, que cayó sobre la región de Cheliabinsk en varios fragmentos. Así lo asegura la portavoz del Ministerio de Protección Civil, Elena Smirnij.
Las localidades afectadas, según el Ministerio de Protección Civil ruso, son Emanzhelinsk, Etkul, Kopeisk, Kórkino, Yuzhnouralsk y Cheliabinsk, la capital de la región. En ésta última un trozo del pedrusco arrasó el almacén de una factoría de galvanizados de cinc y destrozó los cristales de todos los edificios adyacentes. La honda expansiva causada por el impacto ocasionó también daños materiales en fachadas e interiores.
El Ministerio del Interior ruso sostiene que cerca de 700 personas, de las cuales unas 160 son niños, han tenido que recibir asistencia sanitaria a consecuencia de cortes con cristales y lesiones por desprendimientos. Hay nueve personas hospitalizadas de las que tres se encuentran en estado grave. Asimismo, las autoridades rusas han confirmado que el cuerpo que se ha desintegrado sobre los Urales era un cuerpo de gran tamaño que circulaba a 30 kilómetros por segundo y que se desintegró "en pequeños fragmentos" antes de llegar a la tierra.
Nikolái Zhelezniov, un responsable del Instituto de Astronomía Aplicada, cree que el meteorito “debía tener varias decenas de metros de longitud y no pocas toneladas de masa”. Según sus palabras, “los cuerpos de menos de 50 metros se desintegran casi siempre en la atmósfera y, si no se queman totalmente, a la Tierra llegan pequeños fragmentos”.
Testigos presenciales señalan que la violencia de la explosión en el momento del impacto fue tal que muchos creyeron que se trataba de un avión. Quienes no vieron la estela en el cielo pensaron que era un atentado terrorista.

¿Relación con el 2012 DA14?

Algunos científicos no descartan que el evento guarde algún tipo de relación con el asteroide 2012 DA14, cuyo paso está previsto para este mismo día a unos 27.000 kilómetros de distancia de la Tierra. Aunque desde la Agencia Espacial Europea (ESA) se ha asegurado en un primer momento que las dos rocas no tienen nada que ver, otros astrónomos creen que es posible que el asteroide nos haya enviado una «tarjeta de visita» antes de pasar.

Precedente en Siberia

El 30 de junio de 1908 un meteorito cayó en Siberia, cerca del río Podkámennaya Tunguska. Produjo una deflagración de una potencia 185 veces superior a la bomba atómica de Hiroshima. Desde cientos de kilómetros a la redonda se pudo ver una inmensa columna de humo semejante al hongo que se forma tras una explosión atómica.
Los científicos determinaron que aquel objeto cósmico debió tener unos 80 metros de diámetro. Un tamaño parecido al asteroide 2012 DA14, que pasará esta tarde cerca de la Tierra, a unos 27.000 kilómetros de distancia. Desde que comenzaron las observaciones de cuerpos celestes, nunca antes se había registrado una proximidad tan grande.
Fuentes de ABC.